lunes, 21 de abril de 2014

No, no era tu cuento de amor.

Nunca es tan tarde. No importa el tiempo ni las oportunidades perdidas.
Lo que importa es que llego el día en que te diste cuenta que no era para vos,
que no eran el uno para el otro, que el amor no era lo suyo.
No te sientas culpable y agradece que paso. Y que ya el miedo no te impide verlo.

Nunca se amaron como debieron. Fue una mala casualidad simplemente.
Dos personas que se gustaron. Dos buenos amigos que por alguna razón quisieron estar juntos.
Quisieron permanecer juntos, compartiendo la vida.
Dos personas muy leales que por el cariño que sentían y por el tiempo juntos,
decidían tomarse de las manos al caminar.
Pero la pasion, esa locura por el ser amado, ese deseo intenso de hacer feliz al otro...
...no, no estaba entre ellos. No era lo suyo.

Y no importa el tiempo perdido, créeme.
Todavía queda camino por recorrer,
y quizás te encuentres, por allí, sin pensarlo con esa persona que te vuele la cabeza
y te ancle el corazón... antes de lo esperado, quizás.


Por eso no te arrepientas.

Va a doler tu corazón hasta que se olvide que creyó amarlo con pasión.

Va a dolerte el pensamiento, hasta que se olvide de pensar en él y de pensar con él.
Pero tranquila, luego todo será aliviador.
La verdad es sanadora, no lo olvides y agradece que al fin sucedió.

El miedo se fue, y lo sé: este no era mi cuento de amor.

martes, 8 de abril de 2014

Un final más.





Ni el tiempo. Ni la situación. Ni el día. Ni las palabras ni la forma. Ni tu sonrisa ni tu mirada. Ni mi ropa. Ni el lugar. 
Nada fue lo indicado, lo correcto, lo esperado, lo debido. 
Nada como tendría que haber sido. Ni vos ni yo fuimos los exactos. Ni este cuento que quisimos escribir.

No quiero seguir, no. Prefiero sufrir porque no estas.
 Ya no mas de tu presencia en esta habitación.



martes, 12 de noviembre de 2013

Sí, seguí.

Tocas fondo y volvés a subir, salís a flote. 
Felicitaciones.
Te caes, te arrodillas, te aferras a lo que sea y te volvés a parar. Sin miedo seguís caminando. 
Felicitaciones.
Te enamoras, te destrozan las ilusiones, juegan con tu corazón. Lo rompen en mil pedazos, pero vos lo armas de nuevo... pero vos volvés a sonreír, y algún día planeas enamorarte de nuevo. 
Felicitaciones.
La gente que tanto amas se va temprano, algunos sin previo aviso. Y aunque lo sepas, nunca estás preparado para esas despedidas... Pero lo haces; de alguna manera los dejas ir y aprendes a convivir con eso. Y aprendes que de eso va esta vida y que, a pesar de ello, es muy maravillosa. 
Felicitaciones.
Te hundís y tocás fondo. Te caes y te golpeas. Te enamoras y te destrozan el corazón. Te despedís de los que se van, aprendes sobre extrañar. Pero seguís, no te rendís. 
¿Encontraste a alguien que te ayudó? ¿O tuviste que remar solo contra la corriente? Mientras más difícil te haya sido, más lindo te suena: Felicitaciones por seguir...


viernes, 12 de julio de 2013

Acá extrañamos tu sonrisa, todos por igual.

Y con la música sonando y retumbando en la habitación, los dos la recordábamos.
Mirábamos el stereo... y para los dos era como una visión: ella ahí tan sublime como nadie, bailando sin resguardos, con magia a su alrededor, y disfrutábamos de ella con una gran sonrisa.
Puedo asegurar que la escuchamos reír entre medio de la música, entre medio de su baile.
Los dos sonreíamos increíblemente, pero con tanta nostalgia. Si hubiera habido menos de ella en esa habitación, quizá mi papá y yo nos hubiéramos atrevido a bailar juntos. Pero sólo nos conformamos con disfrutar de verla bailar y reír...
Fue un momento único. 'Nadie le ganaba', me decía él; yo me sonreía mientras mi corazón deseaba a mil latidos tenerla con nosotros de nuevo. Quizás a mi papá le pasó lo mismo, pero no lo supe ni yo ni él; los dos estábamos abstraídos en ella, en la hermosura de ella. 


Cuanto la extrañamos. Nunca menos, siempre igual y más.


jueves, 4 de julio de 2013

Que no me quieras olvidar nunca.





"Te amo por todo lo que eres, por todo lo que has sido, por todo lo que serás".









Nada me hace tan feliz como sentir, al irme a dormir cada noche, 
que mañana me seguirás amando como hoy.

Después de tanto, después de todo, acá estamos vos y yo deseando infinitos juntos.

Como es que persistimos en amarnos tanto, no lo sé.
Pero me encanta que sea así, no imagino una vida donde no fuera así.
Y no quiero pensar ni por un segundo en una vida lejos de tus sueños, lejos de tus caricias, lejos de tu voz, lejos de tus silencios, lejos de tus ojos, lejos de tu boca, lejos de tus brazos...
Nunca lejos de tu amor, mi amor.

Después de tanto, después de todo, acá estamos vos y yo deseando infinitos juntos.

Y si pidiera un deseo, y si supiera que el deseo se cumpliría, no dudaría en pedirte para toda la vida.
No dudaría en pedirlo: a vos y para toda nuestra existencia, mucho amor y que no me quieras olvidar nunca.

Con tus sueños, tus caricias, tu voz, tus silencios, tus ojos mirándome, tu boca, tus brazos...
 Con vos.
Qué lindo es pensarnos, mi amor.

Después de tanto, después de todo, acá estamos vos y yo deseando infinitos juntos.



lunes, 3 de junio de 2013

Algo más que la misma sangre.


Con silencios yo supe quién era. Con silencios pasé los mejores y los peores momentos a su lado.
Él era así. Silencio para decir elogios, silencios para mostrar enojo, silencio para ignorar, silencios para prestarte atención, silencios para abrazos largos y fuertes, silencio para desaprobar lo dicho.
Él era así. Un hombre de silencios. 
No se podía más que conocerlo de esa forma, saber interpretarlo, entenderlo y amarlo así... 
y amarlo con todo tu corazón así.
Algo bueno de la ausencia de sus palabras es que podía estar horas imaginando que él me decía lo que sentía, bueno o malo, y yo le retrucaba y hablábamos durante horas,
 o discutíamos hasta gritarnos y luego nos pedíamos perdón. 
Era triste no poder decirle lo que necesitaba porque él no me decía lo que yo sabía que pensaba.


Y lo heredé, y me complace hacer silencios en mis peores y en mis mejores momentos. 
Disfruto de callar cuando quiero gritar palabras sanas.
Disfruto de callar cuando me tienta herir.

lunes, 22 de abril de 2013

Y así es como quiero mi vida, llena de vos y yo.

No quisiera ser otra persona en esta vida. 
No quisiera ser amada en esta vida por otra persona que no lleve tu nombre y tu apellido,
tu corazón y tu historia. 
No quisiera que nuestro amor se parezca a ninguno,
 ni siquiera a aquellos de películas.
Que sea tan único y tan nuestro es lo que me fascina.

Todo lo que tengo, hoy y ahora,
 es todo lo que quiero. 
Vos y yo... esto... vos y yo.
 Abrazos, besos, sonrisas, y más miradas que palabras.

.
Te amo.


domingo, 21 de abril de 2013

Y será la última vez, lo prometo.

Dejame perderte y recuperarte. Dejame descubrir cuanto te amo.
Dejame sentir la satisfacción de elegirte otra vez para siempre. 
Dejame extrañar tu amor, tu voz, tus brazos y tus besos...

Permitime fingir que no te quiero, darme cuenta que me equivoco, y volver a tu lado después de todo. Permitime darme otras oportunidades y conquistarte de nuevo, luego.

Vos sabes que voy a volver. Sabes que mi lugar en el mundo no es otro sino a tu lado. 
Que pido y deseo vivir y morir sintiendo tu respiración sobre mi hombro.
Que nuestro amor es sin límites. Que es tan fuerte que nos permitirá reunirnos otra vez. 


Dejame sentir que me amas tanto como para perderme y dejar que te recupere una vez más.


lunes, 15 de abril de 2013

A veces tarde hace que nunca pase.

Porque llegaste tarde? En algún momento cambie mi camino, en alguna decisión tonta te perdí. 
Me quedé con lo que pude pero hoy que te encontré me di cuenta que debí haberme quedado con más.
Las vueltas atrás en la vida son imposibles. Pero todo lo necesario es posible. 
Así que me pregunto: ¿te necesito lo suficiente como para volverte real?

No me rindo porque nunca luche; solamente digo que cuando te vi, entendí que toda la vida te estuve extrañando. Y sin más, eso seguiré haciendo. 
Sin buscar la forma de borrarte, voy a sonreír con el recuerdo de tu mirada.

Ambos lo supimos, llegaste tarde y te fuiste temprano...


lunes, 18 de marzo de 2013

¿Te perdiste ya?

¿Qué das? ¿Qué ofreces? ¿ Cuánto esperás? ¿Cuánto más necesitas?
¿Cuándo vas a terminar? ¿Cuándo lo vas a saber?
¿Cuánto crees poder hacer? ¿Cuánto crees en vos?
¿Qué sentís cuando pensas? ¿Qué sentís que perdes?

Los miedos se agrandan y hasta anularte si querés. La confianza te mata si querés. Las inseguridades te borran hasta inmovilizarte si las dejás. La seguridad te intensifica y si la dejás, te hace explotar.
Pero vos decidís. Decidí bien.
Si no, te hundís... hasta desaparecer, o te fragmentas y estás en todo el mar sustancialmente pero sin ser vos, en realidad te perdes.

No te pierdas, yo todavía te quiero.

Transformemos lo que somos sin perdernos. Vayamos en línea recta, si querés demos una vuelta pero no dejemos de avanzar.

¿Cuánto esperamos? ¿Cuánto crees que aguantemos?  ¿Cuanto crees en nosotros?

¿Que sentís cuando pensas? ¿Qué sentís que perdes?

No te pierdas, yo todavía te quiero.

viernes, 22 de febrero de 2013

Ya te amo, terminemos.

"Basta. Terminemos con esto ahora, antes de que estallemos y vuelen por el aire nuestros corazones rotos.
Basta. Terminemos con esto ahora, antes de empezar.

No te vayas, y nunca vuelvas. No estés, no te fugues, no me acompañes ni te ausentes.
No quieras, no me pienses. No me nombres, no me engañes.

No voy a mirarte. No voy a hablarte con dulzura. No voy a caminar de tu mano. No voy a ser tu amor. No voy a defenderte. No voy a arruinarte. No voy a besarte. No voy, con vos no voy.

Sin miradas, sin ternura derrochada, sin desilusión, sin corazonadas.
Sin ofrecer lo eterno, sin quererlo. Sin vos es más fácil; sin mí, más todavía.

Basta, terminemos ahora antes de que suceda eso que nos va a encadenar a sufrir por el otro, a esperar demasiado a veces y a reír menos otras. Terminemos ahora."


No, yo ya estalle. Ya voló mi corazón junto con mi cerebro, y eso es peor que un corazón roto.
Ya empezamos. Ya vine y no me fui, no me voy. Ya te acompaño, no me ausento. 
Ya te quiero y ya te pienso todo el tiempo. Te nombro y sin engaños. 
Ya te miro, te hablo, te beso, te defiendo y voy con vos, y vos conmigo. 
No sé si más fácil o difícil, eso es como quieras llamarlo vos, pero si es más lindo y hermoso.
Terminemos y volvamos a empezar si lo querés así, pero yo ya te amo y vos a mí también.

...

sábado, 9 de febrero de 2013

Y sentirse feliz dura poco si querés.



Llevamos cargas. Pesos por ciertas responsabilidades
A veces la vida nos carga, y hasta quizás sin darnos cuenta. Otras veces sucede que somos nosotros mismos los que lo hacemos porque lo necesitamos o porque creemos que no tenemos otra opción.


No sé si todos. Supongo que habrá muchos que, sea de la forma que obtengan su carga, se liberan de ella y qué más da, sólo siguen.

Lo difícil es cuando te ahogas por el peso, te quedas sin aire y sentís que no podes más. Pero como la carga es tuya y muy probablemente invisible para los demás, estás solo y tenés que levantarte por vos mismo. Como puedas, es tu problema. Sería tan patético rogar por ayuda, así que te levantas y respiras hondo y estás listo para otro round.

Algunos días, en que me ahogo yo misma, me atrae de una forma fascinante pensar que el mundo se pudiera parar por algunos minutos. Y yo me sentaría en el medio de la ciudad, y mientras todo está en pausa, yo lloraría sin secar mis lágrimas.

Y mientras me libero imaginando aquello, me surge una idea. ¿Saben que sería más liberador que eso? Que mientras esté allí, llorando y descansando mi corazón, venga alguien. Una persona cualquiera, que me conozca o no, no importa. Alguien que me note, que al menos sepa que necesito un abrazo, que necesito llorar acompañada.

A veces las cargas no pesan, y otras veces se vuelven livianas con ilusiones y esperanza. 

Pero cuando pesan más que nunca y me rinden, vos no estás. 
¿Donde estás cuando más te necesito?
 Yo quisiera, con todo mi corazón, que seas ese alguien...


viernes, 1 de febrero de 2013

Vivo, sonrío y te amo.

Sentir que estás bien vivo.
Vivir o morir. 
No estaría bien que te sientas en un intermedio ni que combines ambas opciones.

Mirarte, sonreír y darte la mano.
Sentir la ternura de tu mirada, la paz de tu sonrisa, y la calidez de tu mano.
Saber que estoy viva, plenamente viva.

Nada me ata a lo opuesto. Sólo es vida lo que respiro hoy.
Es felicidad sentirme así.
Todo va bien. Con lo imperfecto de siempre, pero con vida en cada rincón.

No escatimo en sonrisas, hoy entendí que sólo valen y brillan más cuando son de verdad.
Cuando no sólo las fingís para que nadie sepa lo mal que estás, sino cuando entendés que si te llenas de amor no hay nada que se interponga entre sonreír y vos.
Dejar ir lo que se opone a vida. Sólo vivir, y para ello sólo amor.

Para mí, sólo vos.

viernes, 18 de enero de 2013

Una verdad que no se quiere mirar.

 Tanto lo pensó, tanto le dio vueltas al tema, tanto le costó tomar el valor para preguntárselo. Tenía miedo a la respuesta, no quería ver una realidad que avanzaba y amenazaba con caer sobre él como una ola del mar. Él sostenía con su amor algo que parecía que ya no podía sostener más. Ella no era de la forma que el pretendía, como él lo merecía. Ella iba a ser siempre eso que él odiaba, por mas que los dos se esforzaran por ocultarlo. 

La verdad siempre cae, de repente y con fuerza cae sobre vos. Puede aplastarte el corazón y explotarte el cerebro, todo depende cuanto hayas estado conteniéndola, cuanto tiempo hayas estado mintiéndote, cuán grande sea tu fraude.

Se lo preguntó. Ella le respondió con la verdad. Si había algo bueno en ella es que cuando se lo preguntabas nunca respondía con una mentira. Era transparente y no mentía, solo había consentido con él en creer que era distinta, que era mejor, que era para él. Ella lo amaba, él también.


Ahora todo estaba en él. Cuando la verdad cae sólo tienes pocas opciones. La tomas y sigues adelante;  la ignoras y haces como si cerraras un cajón al que luego le pones llave, y sigues adelante sabiendo que tienes la verdad pero no la quieres; o la ignoras y te sientas a esperar a que la verdad sea distinta. 

Él la miró a los ojos. Ella le dijo que no volvería a pasar, que la entendiera. Él no tenía opción. La tomó de su mano y siguieron caminando. Como si nada, pero con todo el amor que sentían que era lo único que querían ...


lunes, 14 de enero de 2013

Y seguimos brillando.


El sol brillaba casi mágicamente. Todo lo que había bajo el sol brillaba hasta como si las cosas tuvieran luz propia. Y yo estaba allí en ese maravilloso paisaje, observando todo aquello, intentando no extrañarte, luchando para dejarte atrás.

Pero todo era tan bonito ese día, que hasta pensé que era un sueño y de repente aparecías. Venías caminando con tu mochila sobre tu espalda, por la calle. Te dabas vuelta para asegurarte de que no vinieran autos, y seguías con tu paso firme y seguro hacia mí. Como si hubieras dado toda una vuelta al mundo por mí, para llegar hasta a mí. Sin cansarte, con el corazón latiendo dándote fuerzas. 

Si no fuera un sueño, sentiría que me amas tanto como yo aún. Aunque no dejo de verte venir. No dejo de verte brillar con este sol de este día. Te detenes y miras alrededor buscando la orilla del río, te adentras entre los arboles, los pastos y las piedras. Me levantó de la piedra en la que estuve sentada y te sigo. Si esto es un sueño, quiero besarte y al menos escucharte decirme "te amo".

Vas hasta el río. Luego de quitarte la mochila, sumergís tus manos y lavas tu rostro. Te das cuenta que estoy a unos metros, mirándote dispuesta a ir corriendo hacia ti en el momento preciso, en el momento en que tu sonrisa me llame. Unos segundos más y sonreís... y allá voy. 

Un abrazo, un beso, miles de "te amo". No era un sueño, sólo es otro párrafo escribiéndose en nuestra historia. Otra vez más cruzando los problemas, los miedos, los terceros y hasta el mundo para encontrarnos en este amor tan verdadero que nos une, que nos hace brillar la vida y los días, exista un sol o no.